Detuvieron a un hombre por el brutal crimen de una niña de 3 años

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La justicia entiende que golpeó a su hijastra hasta matarla, molesto por los llantos de la menor que extrañaba a su mamá. El hecho ocurrió hace 12 años en Alejandro Petión. Posteriormente el hombre fue preso por otro homicidio, pero el año pasado obtuvo la libertad condicional. Ahora la policía lo aprehendió en Olavarría por el asesinato de su hijastra.

 

Un hombre de 32 años, identificado como Alfredo Antonio Sandoval, fue detenido este jueves en Olavarría por personal de la DDI Cañuelas, por el caso de la muerte de Bárbara, una niña de tres años, ocurrida en el año 2004 en la localidad de Alejandro Petión.

Sandoval fue detenido por orden de la fiscal Ana María Medina y el juez Federico Atencio, acusado del delito de “Homicidio agravado por haber cometido contra una menor de edad y con alevosía”.

Se trata de un caso que data del 21 de marzo del 2004 y que en su momento generó conmoción en Cañuelas. En aquel momento, se conoció que una niña de tres años, identificada como Bárbara Ailén Bruno, ingresó al Hospital Marzetti sin vida, producto de serios traumatismos.

La menor fue llevada al lugar por Sandoval, su padrastro, quien alegó que se había golpeado al caer de una bicicleta. Desde un primer momento la versión del hombre y su concubina –la madre de la pequeña- fue puesta en duda, y ambos fueron imputados por el delito de “Abandono de persona seguido de muerte”, ya que consideró que la niña no había recibido atención médica debida tras el golpe, a causa de una actitud negligente de la pareja.

El caso fue a juicio, y de los testimonios surgió un panorama mucho más grave: se descubrió que no sólo la niña fallecida, sino también su madre, eran víctimas permanentes de violencia por parte de Sandoval.

En el debate oral quedó demostrado, por ejemplo, que era habitual que Sandoval sometiera a malos tratos y castigos a la niña cuando ésta lloraba. Incluso llegó a morderla en la espalda en una ocasión en que la menor se quejaba por una enfermedad y el hombre no podía conciliar el sueño.

El médico que estuvo a cargo de la autopsia de Bárbara, describió en el juicio las lesiones en el cuerpo de la niñita, y habló de “múltiples traumatismos  de diversa gravedad en todo el cuerpo, las que provocaron el deceso” llegando a la conclusión que las mismas  no eran producto de una simple caída de una bicicleta como se había dicho, sino que por el contrario se debían a una serie de castigos recibidos por esta  en forma constante a lo largo de un lapso de tiempo.

El desenlace se produjo por un golpe muy fuerte en la zona del abdomen que le provocó una hemorragia importante que devino en  su muerte. Según pudo reconstruir la Justicia, el día de la muerte de la niña, su mamá regresó tras haberse ido a cocinar en la casa de un familiar (ya que en su vivienda no tenía donde hacerlo) y encontró a la menor sangrando por la boca y temblando. Cuando le preguntó a Sandoval qué había ocurrido, éste le gritó que la niña se había caído jugando, y le dio una patada en el vientre pese a que la mujer cursaba un embarazo de 5 meses. Luego la niña se descompensó y finalmente falleció.

Con posterioridad al crimen de Bárbara, Alfredo Sandoval cometió otro homicidio en la localidad de Azul, y fue condenado a 15 años de prisión, pero en agosto del 2015 consiguió el beneficio de la Libertad Condicional, y ahora vivía en Olavarría.

Pero ahora fue nuevamente detenido por el caso de la niña, del que ya pasaron 12 años.