Desbarataron una fiesta clandestina por la denuncia de un vecino.

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El pasado sábado en la madrugada la policía irrumpió en una fiesta “clandestina” ya que en épocas de pandemia hasta ahora está prohibido este tipo de actividad que supere las 10 personas. La fiesta se realizaba en un lavadero ubicado sobre la ruta 205.

La denuncia vino por parte de un vecino alertando de la música alta y mucho movimientos de gente, Al llegar la policía constato que había mas de 50 personas, disfrutando de la fiesta.

Los presentes al observar la llegada de los efectivos comenzaron a correr para distintos acampados de la zona, los agentes lograron interceptar a cinco de ellos, quienes fueron aprehendidos por violar el decreto presidencial para impedir la propagación de una pandemia (Art. 205) y resistencia a la autoridad (Art. 239). La policía procedió al secuestro de un parlante portátil y varias bebidas: cuatro gaseosas Manaos, cuatro vinos Termidor, dos botellas de vino blanco dulce, una gaseosa Sprite, una Mariposa, un jugo multifrutal y una bolsa de hielo.